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A FONDO
LALÍN EN LA ENCRUCIJADA, PARA SER UN DESTINO DE PRIMER NIVEL EN EL SECTOR DEL TURISMO SOTENIBLE EN LA NATURALEZA
Fecha 27/01/2023
Aunque con notables diferencias entre sí, Galicia empieza a apostar decididamente por modelos de sostenibilidad turística en el medio natural. Las popularmente conocidas como “cabañas turísticas” son el mejor ejemplo, se trata de infraestructuras que apuestan por un turismo cercano a la naturaleza, pero sin por ello renunciar a comodidades propias de un alojamiento convencional. Galicia cuenta ya con algunas iniciativas que comercializan y gestionan grupos de cabañas vacacionales en lugares como Teo, Boqueixón, Beche (Abegondo),Finisterre, Lires (Cee), Outes, Mazaricos, Moaña, Dumbría, Canide (Mera),Aloia (Tui)… además de otras muchas individuales (que, en este caso, siguen modelos más tradicionales del turismo rural convencional). A esta oferta creciente, en número e interés, se vienen a sumar ahora los proyectos lalinenses de Muiño de Cuiña y la francesa Huttopia.
Este modelo turístico basa su creciente aceptación y crecimiento en la práctica de un "Turismo Sostenible" dirigido al cliente urbano, con poder adquisitivo medio y medio-alto. Para que exista sostenibilidad esta tiene que serlo en el plano económico, social y medioambiental. Económico acostumbra a serlo, ya que existe una creciente y sólida demanda; social lo consigue cuando se implica, en los beneficios que genera, a las comunidades locales en las que se insertan estos establecimientos (mano de obra, comercio de materias primas, alimentación, artesanía…) y la sostenibilidad ambiental se alcanza mediante la implantación de sistemas de calidad respetuosos con el medio: generación de energía renovable para abastecer sus necesidades energéticas, depuración integral de aguas residuales, recogida separada de todos los residuos producidos incluido el compostaje de la materia orgánica, uso de materiales de construcción de bajo impacto visual y ambiental, consumo de materias primas locales, gastronomía kilómetro0, huertos y agricultura ecológica, movilidad baja en emisiones…. Acciones que se completan con sistemas de compensación de emisiones, para obtener la neutralidad climática. A las buenas prácticas se añade el disfrute respetuoso de infraestructuras y servicios que proporciona el entorno como rutas peatonales de senderismo, rafting, turismo monumental, museos, o el desarrollo de acciones de sensibilización y buenas prácticas en la naturaleza, por parte del usuario yel fomento de hábitos de uso de recursos saludables y respetuosos con el medio.
PRADO EL EPICENTRO DE ESTE MODELO
Prado, es una parroquia lalinense que se ubica en un lugar privilegiado para proyectos de estas características. Por la parroquia discurren (se unen unos centenares de metros antes) los Caminos Xacobeos de Inverno y Mozárabe a Santiago (variante Sanabrés, mal llamado Camino de la Plata), la carretera Nacional 525, el Río Deza… allí se encuentran decenas de muestras de un rico pasado etnográfico y arquitectónico difícilmente igualable. Su paisaje se caracteriza por una biodiversidad considerable (no exenta de ciertos riesgos como la expansión de la invasora acacia mimosa, procedente de una masa en la ladera de Silleda, sin que se actúe por ninguno de los dos concellos en su control); pero sobreviven carballeiras y soutos, arboledas que van unidas a este tipo de explotaciones turisticas allí donde se implantan.
DOS PROYECTOS
En el entorno del conocido Muiño de Cuiña la familia que le da nombre, con el empresario Eladio Cuiña al timón, ha hecho “encaje de bolillos” para hacerse poco a poco con la propiedad de hasta 77 pequeñas fincas y parcelas, ubicadas en una bella ladera que cae sobre el Río Deza, aguas abajo de Ponte Taboada. Allí esperan poner pronto en marcha una empresa de actividades turísticas, que pivota sobre el modelo de “cabañas del bosque”, sostenibles y perfectamente integradas en el monte de la zona. El entorno es el que configura el propio molino de 108 años de historia, la ruta vinculada a este y un cultivo de 3.000 plantas de arándanos que alcanzará producciones de 12 a 14.000 kg/año, certificados por el CRAEGA. El objetivo es que este “complejo rural y sostenible” esté operativo en 2024 con las diez cabañas que lo compondrán, de las que 5 estarían ya operativas a finales de este año.
No muy lejos de allí, en el Bosque de Borralla, a pie de Camino a Santiago y a la vista del Pazo de Liñares una reputada empresa turística francesa HUTTOPIA, que promueve y explota complejos de este tipo en Francia y en expansión por varios países, ha puesto también sus ojos en el entorno de la parroquia de Prado y en las cercanías del Río Deza y los Camiño de Inverno y Camiño Mozárabe a Santiago de Compostela. Huttopia apuesta por un complejo de tamaño medio / grande en una gran parcela de bosque autóctono centenario, desde el que ofrecer actividades en la naturaleza diseñadas por la empresa, además de las clásicas que el entorno ya permitirá disfrutar. Huttopia (https://europe.huttopia.com/es/) en sus más de 15 destinos y con varios en proyecto en la península, de los que Lalín sería el primero, apuesta por un modelo de turismo desestacionalizado, para disfrutar cualquier época del año. Huttopia contará para el proyecto con una parcela boscosa de nada menos que 150.000 metros cuadrados, lo que le permitirá acometer un ambicioso complejo de alojamiento, servicios y actividades.
PLAN DE SOSTENIBILIDAD TURÍSTICA EN DESTINO
Además de paisaje la zona ofrece un gran patrimonio monumental y una razonable oferta gastronómica y de servicios que, seguramente veremos aumentar con el paso del tiempo. Desde un punto de vista de destino, la entrada en servicio de ambas infraestructuras de turismo sostenible en la naturaleza, supondrá un seguro pilar para lanzar a Lalín como destino multifuncinal (alojamiento, gastronomía, paisaje y monumental… que se completa con su rico patrimonio etnográfico e inmaterial). Seguramente es el momento para que el CONCELLO DE LALÍN articule, desde ya, un Plan de Sostenibilidad Turística en Destino, tipo de proyecto prioritario en la actualidad para la administración del estado y la autonómica, y que cuenta con importantes ayudas financieras para su diseño y para la implementación de infraestructuras y servicios de apoyo.
El programa de Planes de Sostenibilidad Turística en Destinos busca mejorar los destinos turísticos invirtiendo en actuaciones que mejoren su competitividad, atraigan turistas y dinamicen el sector privado. Pretende, además, incorporar de manera efectiva la sostenibilidad y la digitalización en la gestión de los recursos, infraestructuras y productos turísticos de los destinos.
Otro de los objetivos es diversificar la oferta turística, contribuyendo a generar oportunidades de empleo y actividad por todo el país, repartiendo los beneficios que comporta la actividad turística y favoreciendo la cohesión territorial y la desconcentración de la demanda, derivándola también a zonas rurales.
Los Planes de Sostenibilidad contribuyen a mejorar el capital natural del sistema turístico, garantizando su preservación mediante la reducción de emisiones de gases contaminantes, siendo más eficientes en la gestión de residuos y de consumo de agua, protegiendo y restaurando ecosistemas y mitigando los efectos del cambio climático.
Este modelo turístico basa su creciente aceptación y crecimiento en la práctica de un "Turismo Sostenible" dirigido al cliente urbano, con poder adquisitivo medio y medio-alto. Para que exista sostenibilidad esta tiene que serlo en el plano económico, social y medioambiental. Económico acostumbra a serlo, ya que existe una creciente y sólida demanda; social lo consigue cuando se implica, en los beneficios que genera, a las comunidades locales en las que se insertan estos establecimientos (mano de obra, comercio de materias primas, alimentación, artesanía…) y la sostenibilidad ambiental se alcanza mediante la implantación de sistemas de calidad respetuosos con el medio: generación de energía renovable para abastecer sus necesidades energéticas, depuración integral de aguas residuales, recogida separada de todos los residuos producidos incluido el compostaje de la materia orgánica, uso de materiales de construcción de bajo impacto visual y ambiental, consumo de materias primas locales, gastronomía kilómetro0, huertos y agricultura ecológica, movilidad baja en emisiones…. Acciones que se completan con sistemas de compensación de emisiones, para obtener la neutralidad climática. A las buenas prácticas se añade el disfrute respetuoso de infraestructuras y servicios que proporciona el entorno como rutas peatonales de senderismo, rafting, turismo monumental, museos, o el desarrollo de acciones de sensibilización y buenas prácticas en la naturaleza, por parte del usuario yel fomento de hábitos de uso de recursos saludables y respetuosos con el medio.
PRADO EL EPICENTRO DE ESTE MODELO
Prado, es una parroquia lalinense que se ubica en un lugar privilegiado para proyectos de estas características. Por la parroquia discurren (se unen unos centenares de metros antes) los Caminos Xacobeos de Inverno y Mozárabe a Santiago (variante Sanabrés, mal llamado Camino de la Plata), la carretera Nacional 525, el Río Deza… allí se encuentran decenas de muestras de un rico pasado etnográfico y arquitectónico difícilmente igualable. Su paisaje se caracteriza por una biodiversidad considerable (no exenta de ciertos riesgos como la expansión de la invasora acacia mimosa, procedente de una masa en la ladera de Silleda, sin que se actúe por ninguno de los dos concellos en su control); pero sobreviven carballeiras y soutos, arboledas que van unidas a este tipo de explotaciones turisticas allí donde se implantan.
DOS PROYECTOS
En el entorno del conocido Muiño de Cuiña la familia que le da nombre, con el empresario Eladio Cuiña al timón, ha hecho “encaje de bolillos” para hacerse poco a poco con la propiedad de hasta 77 pequeñas fincas y parcelas, ubicadas en una bella ladera que cae sobre el Río Deza, aguas abajo de Ponte Taboada. Allí esperan poner pronto en marcha una empresa de actividades turísticas, que pivota sobre el modelo de “cabañas del bosque”, sostenibles y perfectamente integradas en el monte de la zona. El entorno es el que configura el propio molino de 108 años de historia, la ruta vinculada a este y un cultivo de 3.000 plantas de arándanos que alcanzará producciones de 12 a 14.000 kg/año, certificados por el CRAEGA. El objetivo es que este “complejo rural y sostenible” esté operativo en 2024 con las diez cabañas que lo compondrán, de las que 5 estarían ya operativas a finales de este año.
No muy lejos de allí, en el Bosque de Borralla, a pie de Camino a Santiago y a la vista del Pazo de Liñares una reputada empresa turística francesa HUTTOPIA, que promueve y explota complejos de este tipo en Francia y en expansión por varios países, ha puesto también sus ojos en el entorno de la parroquia de Prado y en las cercanías del Río Deza y los Camiño de Inverno y Camiño Mozárabe a Santiago de Compostela. Huttopia apuesta por un complejo de tamaño medio / grande en una gran parcela de bosque autóctono centenario, desde el que ofrecer actividades en la naturaleza diseñadas por la empresa, además de las clásicas que el entorno ya permitirá disfrutar. Huttopia (https://europe.huttopia.com/es/) en sus más de 15 destinos y con varios en proyecto en la península, de los que Lalín sería el primero, apuesta por un modelo de turismo desestacionalizado, para disfrutar cualquier época del año. Huttopia contará para el proyecto con una parcela boscosa de nada menos que 150.000 metros cuadrados, lo que le permitirá acometer un ambicioso complejo de alojamiento, servicios y actividades.
PLAN DE SOSTENIBILIDAD TURÍSTICA EN DESTINO
Además de paisaje la zona ofrece un gran patrimonio monumental y una razonable oferta gastronómica y de servicios que, seguramente veremos aumentar con el paso del tiempo. Desde un punto de vista de destino, la entrada en servicio de ambas infraestructuras de turismo sostenible en la naturaleza, supondrá un seguro pilar para lanzar a Lalín como destino multifuncinal (alojamiento, gastronomía, paisaje y monumental… que se completa con su rico patrimonio etnográfico e inmaterial). Seguramente es el momento para que el CONCELLO DE LALÍN articule, desde ya, un Plan de Sostenibilidad Turística en Destino, tipo de proyecto prioritario en la actualidad para la administración del estado y la autonómica, y que cuenta con importantes ayudas financieras para su diseño y para la implementación de infraestructuras y servicios de apoyo.
El programa de Planes de Sostenibilidad Turística en Destinos busca mejorar los destinos turísticos invirtiendo en actuaciones que mejoren su competitividad, atraigan turistas y dinamicen el sector privado. Pretende, además, incorporar de manera efectiva la sostenibilidad y la digitalización en la gestión de los recursos, infraestructuras y productos turísticos de los destinos.
Otro de los objetivos es diversificar la oferta turística, contribuyendo a generar oportunidades de empleo y actividad por todo el país, repartiendo los beneficios que comporta la actividad turística y favoreciendo la cohesión territorial y la desconcentración de la demanda, derivándola también a zonas rurales.
Los Planes de Sostenibilidad contribuyen a mejorar el capital natural del sistema turístico, garantizando su preservación mediante la reducción de emisiones de gases contaminantes, siendo más eficientes en la gestión de residuos y de consumo de agua, protegiendo y restaurando ecosistemas y mitigando los efectos del cambio climático.